Siempre que se habla sobre prevención de riesgos laborales sea en el sector que sea, una de las medidas de prevención habitualmente recomendadas suele ser el uso de calzado de seguridad.
En muchas ocasiones puede ser evidente el por qué de dicha recomendación y, en otras, puede llamarnos más la atención. Por eso hoy te queremos contar exactamente qué es el calzado de seguridad, por qué usarlo, de qué nos protege el calzado de trabajo… Y todo ello para que por fin entiendas porque es una de las medidas recomendadas más top en prevención de accidentes y lesiones laborales.
¡Quédate y descúbrelo!
¿Qué es el calzado de seguridad?
Aunque habitualmente acostumbramos a hablar indistintamente de todo tipo de calzado para trabajar, debemos diferenciar dos tipos: calzado profesional y calzado de seguridad.
El calzado profesional, calzado laboral o calzado de trabajo es aquel que se suele usar en un determinado sector laboral, por ejemplo, los zuecos en el sector sanitario, zapatos para camareros en hostelería…
De modo que el calzado profesional puede proteger el pie de algunos riesgos de accidentes, pero es un calzado que, según la norma UNE-EN ISO 20347, no garantiza protección contra el impacto y la compresión en la parte delantera del pie.
Mientras que el calzado de seguridad o calzado de seguridad industrial es aquel que protege el pie de riesgos que pueden dar lugar a accidentes y que cumple con la norma UNE-EN ISO 20345. Las características que debe reunir el calzado de seguridad para cumplir con dicha norma son:
- Estar equipados con topes de seguridad para proteger la parte delantera del pie. Lo que habitualmente se conoce como puntera de seguridad.
- Deben estar preparados para ofrecer la máxima protección posible contra un impacto de al menos 200J y contra la compresión con cargas de al menos 15KJ.
- Además, deben tener resistencia al deslizamiento.
¿Por qué usar calzado de seguridad industrial?
Quizás todavía no lo sabías pero, el calzado de seguridad forma parte del equipo de protección individual que los trabajadores están obligados a utilizar en su puesto de trabajo.
Ya que en determinados puestos de trabajo nuestros pies están expuestos a riesgos como, caídas de objetos u objetos puntiagudos, impactos en el talón, resbalones, pinchazos, salpicaduras químicas, descargas eléctricas…
Y, sumado a todo ello, usar un buen calzado en el trabajo, bien sea de seguridad o no, evitaría muchas de las dolencias en los pies y en la espalda.
¿De qué nos protege el calzado de seguridad?
Para saber de qué nos protege el calzado de seguridad solo es necesario conocer la norma bajo la que se guía, la Norma EN 20345. Esta supone que el calzado, como hemos dicho más arriba, debe proteger contra impactos y compresión mediante la puntera de seguridad adecuada y, por otra parte, debe contar con una suela resistente al deslizamiento.